Blanco y negro

Me encanta.... /No me gusta...


Que me acaricien el pelo / No poder abrazar
La sinceridad / Haberme equivocado otra vez
Estar rodeada de mi gente / Que estes tan cerca y a la vez tan lejos
Que confíen en mí / La falta de respeto
Que me cuenten secretos / Los que hablan sin saber
Dormir abrazada a alguien especial / La soledad
El aire puro de las montañas / No controlar la situación
La calma / Tener que estudiar
Escuchar un "Te quiero" / Que no me escuchen cuando hablo
Que me hagan reir / La indiferencia
Que me mimen / La prepotencia
Un susurro al oído / Amar y no ser correspondida
Una conversación profunda / La cabezonería
Los dulces / La distancia
Estar cerca del mar / La falta de humildad
El olor a limpio / La intolerancia
Las tardes lluviosas / Que me mientan
Quedarme un ratito mas en la cama / El ruido del despertador

Contradicciones

Cuando lo tienes prácticamente todo en la vida,

cuando eres felíz con lo que haces,

con lo que sientes y con lo que quieres,

sientes miedo a cambiar de forma de vida,

esa manera de vivir de la que todo el mundo

habla y asegura que es la mejor forma

de sentir la felicidad...la vida en pareja.

No quiero sentirme atada y sin embargo lo echo de menos,

siento esa necesidad de represión, de austeridad...

Quiero volver a la complicidad, al romanticismo,

a la monotonía.

Pero de repente recuerdo quien soy, como soy

y como me encanta mi vida...

Seguiré viviendo así hasta que se me vuelva a olvidar...

Tu perfume y el mío...

Te odio, pero te adoro. Te odio por permitir que mi cuerpo se abandonase en tus manos, por dejarte que seas mi maestro, mi mentor.

Fui idiota por dejarme deslizar por tu cuerpo, por dejarme arrastrar por tus instintos mas primitivos, por olvidarme en tu olor y por perderme en tus besos; por dejar la consciencia muda, la cordura ciega y la cabeza...la cabeza la perdí en aquel bar, junto a tus dulces caricias, que nunca más volverán a ser las mismas.

No quiero no volver a despertarme entre tus sabanas, entre tus manos enredadas en las mías, entre tu olor, nuestro olor, y volver a recordar el ambiente que se crea a nuestro alrededor, esa luz tenue de tu habitación, la mezcla perfecta que creaban tu perfume y el mío con ese toque a tabaco del bar y de los cigarros que compartimos junto a los secretos y deseos más íntimos que me contabas al oído entre risas y mordiscos, entre miradas lascivas y besos...infinitos.

Que tontería pensar que te cambiaría, que conseguiría ser la única en tu vida, que te dejarías aconsejar por mí. Y mientras yo pensaba que aprendías de mí, tu me enseñabas a ser quien soy, una depredadora sinfín, una niña que perdió la inocencia y dejó de soñar, dejó de creer en los cuentos de hadas, en los sapos que se convierten en príncipes azules, en el amor sin más...

Y a pesar de todo, soy feliz, porque sé que volverás a mí, como haces siempre en el momento más inesperado y más oportuno, cuando más te necesito y no puedes alejarte más de mí...porque me necesitas, porque me quieres tanto como yo a ti...siempre lo hiciste.